La combinación de perfil y el vidrio, es la que nos da la capacidad de aislamiento térmico y acústico de una ventana. Tan importante es elegir un buen perfil para tus nuevas ventanas, como de escoger el vidrio adecuado y su composición, dado que el vidrio supone un 80% del hueco de la ventana.
De unos años a esta parte, las ventanas de doble acristalamiento se han popularizado debido a las grandes prestaciones que ofrecen y queremos informarte de la importancia que tiene la elección de la composición de las mismas.
Qué es son las ventanas de doble acristalamiento
Las ventanas de doble acristalamiento son aquellas compuestas por dos o más hojas de cristal separadas por una cámara sellada de aire deshidratado o gas. Su baja conductividad térmica y un bajo coeficiente de absorción de la radiación, lo convierte un elemento muy resistente al paso de calor.
«Actualmente este es el sistema predominante para las nuevas construcciones o renovaciones de ventanas, debido a su mayor efectividad a la hora de lograr un mejor aislamiento térmico y acústico.»
Por qué instalar ventanas de doble acristalamiento
La instalación de ventanas de doble acristalamiento, incide significativamente en el consumo de energía de una vivienda. En invierno, se logrará una reducción de la pérdida de calor de la vivienda, y por lo tanto, se requerirá un menor consumo de gas o electricidad para calentar la vivienda. En verano, se logrará evitar la entrada de aire caliente desde el exterior, con el consecuente ahorro en aire acondicionado. Este menor gasto energético general a lo largo del año, se traduce directamente en ahorro económico para el bolsillo de las familias (una menor factura de la luz y/o gas).
«Es decir, la instalación de ventanas de doble acristalamiento contribuye a reducir los gastos mensuales que tiene una vivienda en calefacción y aire acondicionado, además de fomentar la eficiencia energética y sostenibilidad de nuestra sociedad”.
La importancia de la composición
No todos los doble acristalamientos son iguales. El nivel de aislamiento térmico y acústico que ofrecerán unas ventanas de doble acristalamiento frente a otras, va a depender de estos 3 factores:
EL ESPESOR DEL VIDRIO
En las ventanas de doble acristalamiento, el espesor de los vidrios no afecta significativamente al nivel de aislamiento térmico, pero sí al nivel de aislamiento acústico. Aunque lo habitual es encontrar vidrios 4 mm, no siempre es el espesor idóneo para todas las aplicaciones. Pregunta a tu instalador, y solicita el vidrio en función de las necesidades de tu hogar, la composición estándar no tiene por qué ser siempre la adecuada para todas las ventanas de tu hogar (ampliar a 6 u 8 mm, puede ser lo idóneo para aumentar la atenuación acústica de tu hogar, si vives en una zona ruidosa o cerca de una carretera principal).
Lo que sí te recomendamos es colocar un doble acristalamiento cuyos vidrios no tengan los mismos espesores, es decir, el vidrio exterior debe tener mayor espesor que el interior, para potenciar el aislamiento acústico de la ventana. Por ejemplo: una composición 4/16/6, tendrá mejor atenuación acústica que un 4/16/4. (Solicitar vidrios asimétricos).
EL ESPESOR DE LA CÁMARA DE AIRE
Debes saber que a mayor espesor de los cristales y mayor espacio entre ambos, mayor nivel de aislamiento térmico. La cámara entre dos hojas de cristal suele oscilar entre los 6 y los 18mm, pero te recomendamos elegir una composición con un mínimo de 12mm, pues te asegurarás alcanzar un nivel de aislamiento muy bueno, manteniendo el confort dentro de las estancias.
A continuación, y para que compruebes la importancia de la cámara, te dejamos los datos de mejora, al pasar de una cámara de 6 a una de 12 o 16mm, en términos de aislamiento:
Doble acristalamiento con vidrio bajo emisivo (gama media – PLANITHERM 4S)*
Cámara | 4/6/4 | 4/12/4 | 4/16/4 |
Transmitacia térmica | 2,4 | 1,6 | 1,3 |
EL TIPO DE VIDRIOS
En la actualidad existen múltiples tipos de vidrios (con tratamientos específicos) que ofrecen distintas prestaciones. En función de la localización, orientación y necesidades de la vivienda, se recomendará instalar unos u otros, siempre en un doble acristalamiento:
- VIDRIOS BÁSICOS: Aislamiento simple. No están recomendadas para zonas con mucha exposición solar directa. Cuando da el sol (especialmente en verano) es necesario proteger la ventana mediante un toldo o una persiana para evitar la entrada del calor en la vivienda. Es quizá la solución más habitual que podemos encontrar, pero sus prestaciones aislantes son bajas, por lo que no recomendamos elegir este tipo de acristalamiento.
- VIDRIOS BAJO EMISIVOS (Be): Estos vidrios ofrecen un aislamiento térmico hasta tres veces superior frente a un doble acristalamiento básico. Ensamblado en un doble acristalamiento, uno de los vidrios cuenta con un tratamiento especial (vidrios con capa bajo emisiva) que contribuyen a mejorar el aislamiento térmico del hogar significativamente. Son también conocidos con vidrios de Aislamiento Térmico Reforzado (A.T.R).
- VIDRIOS BAJO EMISIVOS CON CONTROL SOLAR (Be + Cs): Ensamblado en un doble acristalamiento, uno de los vidrios cuenta con las ventajas de los vidrios bajo emisivos (A.T.R), a lo que suma un plus de control solar: con la consiguiente reducción de rayos ultravioletas, disminuyendo el calor que penetra en la vivienda. Con el beneficio añadido de posibilitar una estética muy neutra, gracias a su elevada transmisión luminosa. Es recomendable para localizaciones con mucha exposición al sol (este, sur, oeste).
- VIDRIOS CON TRATAMIENTO ACÚSTICO: Dos o más vidrios unidos entre sí por una o varias láminas de butiral de polivinilo acústico, un aislante acústico que potencia las propiedades de atenuación acústica del doble acristalamiento. Se pueden combinar con un vidrio bajo emisivo, aunando las ventajas de ambos tipos de vidrio en un mismo doble acristalamiento. Es la opción más recomendable cuando el entorno de la vivienda es ruidoso o el confort acústico requerido es elevado.