Con el precio de la luz y el gas subiendo cada día más, la eficiencia energética en oficinas, fábricas, edificios y viviendas cobra especial importancia. Una de las soluciones que puede impactar más directamente para ahorrar electricidad en tu hogar, es el cambio y renovación de las ventanas.
«Según datos del IDAE, la instalación de unas buenas ventanas con aislamiento térmico reforzado (ATR) puede suponer reducir hasta un 60%* las pérdidas de energía de una vivienda.»
Una inversión muy rentable
Además de los electrodomésticos, el grueso del consumo energético (gas o luz) de un hogar depende de la calefacción y aire acondicionado. Es decir, la temperatura de tu casa (y por tanto tu confort dentro de ella) va a depender en gran medida de la intensidad de uso que hagas de estos dos elementos. Pero hay un tercer elemento, normalmente olvidado, que tiene una incidencia fundamental en la factura de la luz: las ventanas.
«Tener unas buenas ventanas se traduce en una reducción de consumos energéticos y por ende, en las facturas de gas y electricidad.»
Por ello, cuando nos planteemos instalar nuevas ventanas (ya sea en una vivienda de obra nueva o en una reforma), y estemos valorando distintos modelos, materiales y marcas, conviene recordar que si se escatima demasiado, lo ahorrado al instalar una ventanas de menor calidad, lo perderemos mes a mes durante los próximos años. Las ventanas son un elemento de nuestra vivienda que nos va a acompañar durante gran parte de nuestras vidas. Instalar unas buenas ventanas nos va ayudar a ahorrar electricidad durante muchos años, por lo que puede ser la inversión más rentable que hagamos en nuestra vivienda.
En qué fijarse para elegir ventanas que nos ayuden a ahorrar electricidad
Elegir la carpintería adecuada
Los marcos tienen bastante importancia en el nivel de aislamiento térmico que ofrece una ventana. En este ámbito, el PVC es una fantástica alternativa. Aunque hoy en día, los marcos de madera y aluminio han mejorado tanto sus prestaciones, y consiguen alcanzar los mismos niveles de prestaciones que ofrece el PVC.
Elegir el vidrio adecuado
No todos los vidrios son iguales, ni ofrecen las mismas prestaciones. El tipo de vidrio que le pongamos a las ventanas nos determinará el nivel de aislamiento térmico, nivel de aislamiento acústico, y seguridad de la vivienda. Los vidrios de Aislamiento Térmico Reforzado tienen la propiedad de mantener el calor del interior de la vivienda, aislando del frío exterior, y durante el verano, reducen las pérdidas de aire acondicionado desde el interior de la vivienda. Instalar ventanas con Aislamiento Térmico Reforzado de la gama SGG CLIMALIT PLUS ayuda a reducir las pérdidas de energía desde el interior de la estancia, y con ello contribuye a ahorrar electricidad, logrando así una mayor eficiencia energética de nuestra vivienda.
Lo más importante a la hora de elegir una ventana es tener en cuenta dónde va a ir situada. Si no somos expertos, nos bastará con saber si nuestro principal objetivo es aislarnos del frío, si es así, el dato técnico más importante a tener en cuenta es el coeficiente de transmitancia térmica, que cuanto más baja sea, mejor aislará esa ventana. Este nivel se calcula a través del valor U que mide el intercambio de temperatura que se produce entre el interior y el exterior de la ventana. Cuanto menor es el valor U del perfil y el vidrio, mayor es la capacidad de aislamiento que tiene la ventana.
Si también buscamos aislarnos del calor durante el verano, permitiendo que entre la luz, a ese coeficiente a tener en cuenta debemos añadir el factor solar (g), que cuanto menor sea, más nos protegerá del sol.
«¿Quieres cambiar tus ventanas y no saber que vidrio es el adecuado? Te ayudamos a elegir. Utiliza nuestra herramienta online de configuración de cristales en 3 pasos.»
* % de ahorros (reducción de pérdidas energéticas) logrados a través del cerramiento respecto a la situación inicial. Cálculos realizados para participación de 30 % Marco y 70 % acristalamiento.
[box]Por ejemplo: SGG CLIMALIT PLUS con PLANITHERM 4S sólo deja pasar un 42% de energía calorífica, con una transmitancia térmica de 1,0(W/K·m²), casi nula, y dejando pasar un 65% de la luz que incide sobre el vidrio.[/box]